Los jesuitas de Bolivia se disculparon el martes y anunciaron una investigación sobre un difunto sacerdote español que presuntamente abusó de varios menores en Bolivia desde la década de 1980.
“Pedimos disculpas por el dolor que esto ha causado”, dijo el reverendo Bernardo Mercado, líder del grupo religioso católico conocido como La Compañía de Jesús. Dijo que la congregación había iniciado una investigación en busca de justicia para las víctimas y describió la situación como “vergonzosa”.
El caso del sacerdote jesuita Alfonso Pedragas Moreno apareció en un reportaje publicado por el diario español El País el pasado fin de semana. Publicó extractos de la lechería del cura, donde supuestamente admitió haber abusado de al menos 85 niños mientras era maestro en Bolivia hasta 2009 cuando murió.
Las autoridades bolivianas no han revelado el número de víctimas ni las fechas en que ocurrieron los presuntos abusos. Pero a principios de esta semana, el fiscal jefe de Bolivia, Wilfredo Chávez, dijo en Twitter que buscaría información del consulado español sobre el caso, para que pueda ser investigado en Bolivia.
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Los jesuitas bolivianos se han disculpado por el presunto abuso infantil por parte de un difunto sacerdote que data de la década de 1980.
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La congregación está investigando dos casos, uno que terminó en abril y determinó la “veracidad” de ese reclamo, y un segundo que aún está en curso.
Odalia Zurita, abogada de la orden de los jesuitas, dijo el martes en rueda de prensa que han pedido a El País un ejemplar de Productos Lácteos Pedragas Moreno, y que toda la información recabada en la investigación será compartida con la fiscalía.
Esta no es la primera denuncia contra sacerdotes por su abuso de menores en Bolivia, pero pocos casos han sido investigados a fondo y llevados ante la justicia.
En 2015, un cura rural fue condenado a 15 años de prisión por abusar de 12 menores. Poco tiempo después, se suicidó en prisión. En 2009, un sacerdote fue condenado a 22 años de prisión por delitos similares.